I.) El misterio de Nefertiti nos acompaña hasta hoy y es poco probable que pueda descubrirse algo más con respecto a ella. Reina de Egipto por su matrimonio con el faraón Akenatón (Amenofis IV). Parece que ejerció una gran influencia sobre el rey, contribuyendo a la revolución política, religiosa, económica y cultural que éste desató al sustituir el politeísmo tradicional egipcio por un culto de tendencia monoteísta al dios solar Atón. Mucha gente piensa que este busto pertenece a la esposa de Tutankamón, ya que por ser las dos figuras más reconocidas popularmente es común que se la relacione (de hecho, en casa de mi madre hay un jarrón, que vaya uno a saber quién se lo regaló, que tiene una reproducción de Tutankamón por un lado y de Nefertiti por el otro). En efecto, existe una relación entre ambos personajes históricos: Tutankamón estaba casado con una de las hijas de Nefertiti y Akenatón. Es decir que Tutankamón era el yerno de Nefertiti (doy todo ese rodeo para evitar decir que Nefertiti era la suegra de… Una mujer con ese cuello que anticipó a Modigliani en más de dos mil años no puede ser la suegra de nadie).
II.) Nefertiti descansa hoy en una sala (para ella sola, como corresponde), en el Altes Museum de Berlín. Particularmente, me gustaría más que descansara en su tierra natal, Egipto. Y no soy el único que piensa así, aunque no sirva de mucho tal cosa. Las autoridades del país africano han solicitado una y otra vez que les sea devuelto el busto de Nefertiti (y muchísimas otras piezas más, pero aboquémosnos solamente a ésta que nos importa hoy) ante lo cual las autoridades alemanas se niegan una y otra vez. Ya se sabe, el poderoso y el que tiene derechos. El que tiene la sartén por el mango y el que tiene la verdad por su lado. La victoria siempre está del mismo lado, no es novedad alguna que éste es un mundo injusto.
La última de las razones que expusieron los meticulosos hijos del pueblo ario fue que temían que la pieza se rompiera en el traslado. Tal cual, no invento nada, eso fue lo que dijeron. Ahora, que los alemanes reconozcan que no tienen la capacidad tecnológica para construir un contenedor especial para esta (u otra) pieza y así poder trasladarla unos cuantos cientos de kilómetros habla muy mal del estado de la industria en Alemania. Que le pidan ayuda a los japoneses, seguro que ellos pueden. Pero que devuelvan lo que no es suyo (y que Inglaterra, Francia, Holanda hagan lo propio).
III.) La pieza de apenas medio metro de alto y realizada en yeso y caliza policromadas destaca por su talla delicada y su composición simétrica. Los colores son suaves, perfectamente armonizados y concretamente en el tratamiento de la piel el realismo es máximo y el tono cálido y sensual. La expresión de esta Nefertiti se halla a mitad de camino entre el tradicional hieratismo de la estatuaria egipcia y el realismo gestual que se intentó introducir en la época de Akenaton. El resultado es un rostro de facciones perfectas y detalles delicados, que dulcifica su seriedad a través de su mirada sosegada y una sonrisa apenas bosquejada. ¿Dónde radica su belleza? ¿En la perfección de sus rasgos, en el gesto mínimo? Me atrevo a una respuesta personal: su belleza reside en el misterio, en la suma de todas esas cosas y en el agregado de nuestro desconocimiento. No de su biografía, sino de eso que nos dice con su presencia. Como todo objeto bello, no podemos más que guardar silencio y enmudecer ante su presencia.
Conocí este busto, lo estudié en arte, pero yo soy de las que pensaba que era su mujer. Jamás la hubiese asociado a suegra. Tampoco conocía su historía del no traslado. Mil besos mi querido Borgeano.
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En Historia del Arte es una de las obras inevitables. La historia del esposo de Nefertiti es muy interesante (de hecho, muchísimo más interesante que la de Tutankamón, por ejemplo, el que fue un Faraón menor). Tan así es que se lo considera el primer monoteísta de la historia.
Me alegro de que ahora ella ocupe el lugar que le corresponde (aunque suene feo, sí, es la suegra de…)
Cariños.
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No sé si el busto es fiel reflejo de como era, pero siempre me llamó la atención su largo cuello, que me parece bellísimo y ella no era nada fea. En la antigüedad había mujeres que tenían que valerse de sus artes para poder hacer valer sus ideas. Quizás incluso en este caso Nefertiti incluso era mucho mejor política que su marido. Tanto con ella, como con la que nos expusite en la anterior entrada, has hecho una gran labor con estas maravillosas lecciones de historia. Saludos
Ana
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Muchísimas gracias Ana, los elogios son excesivos.
Es muy probable que Nefertiti fuese mejor política que su marido, quien estaba demasiado ocupado con el tema de la religión. De todos modos, creo que ésta es una pareja histórica increíble, quizá la primer pareja de importancia histórica.
Es cierto lo que dices; no se sabe con certeza si ella era realmente así, pero creo que es muy probable que lo fuera. El arte egipcio de esa época ya había alcanzado un altísimo nivel y ésta no es la única pieza o reproducción de esta maravillosa Reina. Fíjate que casi nadie pone en tela de juicio las imágenes de Akenatón o de las hijas de ambos (de las cuales hay reproducciones exquisitas, aunque muy poco conocidas).
Gracias nuevamente por tus palabras.
Cariños.
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Ayy sí, ese cuello no puede ser de una suegra!!!! Qué hermosa por favor!
No puedo creer que los alemanes hayan puesto semejante excusa estúpida para no devolver la pieza adonde pertenece, me parece increíble, además es lo que decís, ¿justo ellos no van a ser capaces de trasladarla sin dañarla?
Estuve hace un par de años en el museo del Cairo, y es el museo más maravilloso en el que estuve, además la cultura egipcia me apasiona. No sé si lo conocés, si no es otro sitio que te recomiendo apuntes a tu lista. Yo me habría tirado 3 días ahí adentro, solo pasé uno y me quedaron un montón de cosas sin ver.
Desde luego esta pieza de Nefertiti debería estar ahí…
Un beso, muy bueno tu post
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Pues Egipto es el sitio número uno, sin duda alguna. Todo él. Desde que era adolescente me sentí atraído hacia ese lugar. Supongo –o espero– que cuando pueda ir allí también pueda hacerlo con la suficiente libertad como para quedarme el tiempo que sea necesario.
En cuanto a los alemanes… bueno, dejémoslo ahí. hay veces que las palabras están demás.
Cariños y gracias por tus palabras.
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Pues vaya cuello más precioso tenía la bella Nerfertiti gracias por este gran post.
Ya estoy por aquí amigo Borgeano poco a poco iré poniéndome al día
muaskk
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Pues me alegro de que estés por aquí nuevamente. También me alegra de que te haya gustado el post. Aun quedarán dos o tres más con este tema.
Cariños.
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