He recibido un único regalo en esta navidad. No es que haya esperado nada ni, mucho menos, que pida nada a nadie; sólo doy fe de un hecho puntual. Éste libro me ha llegado por interpósitas manos desde las (para mí) lejanas tierras mexicanas, y el remitente es alguien a quien quiero y admiro muchísimo y quien me brinda regalos para el alma y el intelecto a lo largo de todo el año. Danioska es alguien conocida por todos los que visitan este mínimo espacio y si no lo es, debería serlo. Ya hablaré en su momento de las virtudes de este libro (ya me dado material para un buen par de entradas); pero hoy sólo quiero ser agradecido con quien me ofrece su amistad de manera tan sincera y desinteresada. Y las deudas se pagan. Mínimamente es lo que estoy intentado hacer.
P.S.: Pido perdón, sobre todo a Danioska, pero también a todo aquel que se haya acercado hasta aquí, por lo pobre de la entrada. Es que hasta hace un par de horas yo estaba muy bien, muy tranquilo, de buen ánimo hasta que llegaron esas personas que terminan por molestar con su sola presencia. Algo así me ha pasado y, aunque el hecho es meramente anecdótico, me ha puesto de bastante mal humor. Mañana me explicaré; por hoy lo mejor será que me convierta en astronauta y me vaya a dar una vuelta por alguna galaxia lejana. Hasta mañana.
El Blog de Arena 
Querido, no me imaginaba la trascendencia que tendría el libro pero celebro mucho haberte hecho llegar ese abrazo de papel. No tienes nada que agradecer, en serio, lo hice con mucho gusto y cariño. Gracias a ti siempre por estar siempre ahí, te valoro mucho.
Abrazo doble
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Lo que hace rico a un regalo es, precisamente, el desinterés, la entrega de cariño que acompaña al presente. Hablamos del clásico «valor sentimental» de las cosas. Como cuando perdemos algo que añoramos por alguna razón que excede su valor económico. Por supuesto, éste libro vale oro.
Cariños.
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Pobre dices? me parece una entrada maravillosa y me alegro por ti, y por ella que es maravillosa, gran mujer…el libro tiene buena pinta. En cuanto a estar lejos dices? ajajajaa estáis en el mismo continente, que diría yo pues de ti? si que te tengo lejos aunque te siento cada día más cerca.
besos de gaviota loca!!
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¡Qué rico recibir un libro como regalo! Es para chuparse los dedos y más viniendo de alguien a quien se aprecia mucho.
Espero que tú y Danioska sigan cultivando su amistad (la cual pienso que durará por mucho tiempo).
Saludos 🙂
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Espero que sí. La verdad, que encontrar gente tan afín es un placer que no se da todos los días. Espero que este año me regale más amigos como Danioska; sólo con eso me doy por satisfecho.
Saludos y los mejores deseos.
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