Strange Fruit o el dolor perenne

Billie Holiday

Los árboles del sur llevan una fruta extraña,
Sangre en las hojas y sangre en la raíz,
Negro cuerpo balanceándose en la brisa del sur,
Extraña fruta colgada de los álamos.

Escena pastoral del valiente sur,
Los ojos abultados y la boca retorcida,
Aroma de magnolia dulce y fresco,
Y el súbito olor a carne quemada.

Aquí está una fruta para que los cuervos arranquen,
Para que la lluvia se reúna, para que el viento chupe,
Para que el sol se pudra, para que un árbol caiga,
Aquí hay una extraña y amarga cosecha.

Strange Fruit es una canción icónica grabada en 1939 y que aún tiene el valor de la denuncia y el alegato sobre el linchamiento en América, el cual hoy podemos extender a otras latitudes. Fue grabada por primera vez por Billie Holiday, quien para mí, es la mejor cantante de jazz que ha pisado esta Tierra.

Es una poesía simple pero eficiente. En un momento en que la protesta política no se expresaba a menudo en forma musical, la canción representaba el linchamiento en toda su brutalidad. Los tres versos cortos son aún más poderosos que su lenguaje subestimado e irónico. La yuxtaposición de un bello paisaje con la escena del linchamiento, el olor de las magnolias con el de la carne quemada, las flores más típicamente asociadas al clima del sur con el «fruto extraño» producido por la opresión racial, evoca la esencia del racismo reaccionario; el racismo en Estados Unidos está acusado y expuesto por estas líneas sin ninguna necesidad de un mensaje más didáctico o de agitación.

El poema fue escrito en la década de 1930, después de que Meerpool Abel Meeropol (el autor del poema) viera una foto espantosa de un linchamiento sureño y mucho antes de que se reuniera con Billie Holiday. En ese momento estaba enseñando en la Escuela Preparatoria De Witt Clinton en el Bronx. «Strange Fruit» fue publicado por primera vez como «Bitter Fruit» en la edición de enero de 1937 de The New York Teacher, la publicación de Teachers Union, en la que el Partido Comunista jugó un papel dominante.

Escribiendo bajo el seudónimo de Lewis Allan, los nombres de sus dos hijos que habían nacido muertos, Meeropol puso música al poema por su cuenta. Durante los primeros dos años después de que fue escrita, la canción fue ejecutada en círculos políticos, en reuniones, beneficios y fiestas en casa. A principios de 1939, Billie Holiday se presentaba en la recién inaugurada discoteca Café Society en el bajo Manhattan. Meeropol le preguntó a Barney Josephson, el dueño del club, si Holiday lo cantaría. Según algunos relatos, Holiday al principio no estaba particularmente impresionada por la letra y tal vez no completamente consciente del significado de la canción. Su interpretación, sin embargo, causó una enorme impresión. Comenzó a tocarlo todas las noches y luego lo grabó en abril de ese año.

Billie HolidayDije que Billie Holiday fue la mejor cantante de jazz, y tal vez alguno traiga a la mesa a Ella Fitzgerald o a Sarah Vaughan; las cuales son consideradas como los puntos más altos dentro de este estilo (sobre todo la primera; la cual llega a cotas de perfección difíciles de igualar); pero Holiday será siempre la intérprete por excelencia. El dolor que transmite en esa voz no siempre perfecta, el sentimiento que le imprime a cada fraseo, la cadencia que desgarra cada palabra hacen que ella sea la que mejor transmita aquello que está cantando; de allí mi elección por Billie Holiday por sobre las demás.

Aquí, entonces, Strange Fruit en la versión inmortal de Billie Holiday. Desde 1939 hasta hoy y, por desgracia, hasta un mañana bien adentrado en el futuro.

10 comentarios el “Strange Fruit o el dolor perenne

  1. Shira Shaman dice:

    Cuando uno encuentra cantantes que con su voz nos acercan a la tierra, a sus raíces o como en este caso al dolor, es sumamente conmovedor, algunos dicen que en las alegrías y en las tristezas se conocen a los verdaderos amigos. Las historias como fantasmas van dejando huellas, Billie tuvo muchos vivenciasque se perciben en su interpretación. Yo creo que también el Arte nos acerca a ese lado sensible y profundamente humano, admirando desde nuestra orilla a esos seres que han sido tocados por la genialidad.
    Abrazos

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    • Borgeano dice:

      Creo que éste es un caso donde podríamos hacer el camino inverso, es decir desde el artista hacia su biografía. Me refiero a que a veces lo que los artistas nos transmiten está tan indiferenciado de lo que han vivido que no hay modo de separar una cosa de la otra. El caso de Billie Holiday es uno de ellos; lo que ella transmite en su voz es fruto directo de lo que ha sufrido en su vida y eso se nota ¡Y cómo! De allí que siga diciendo que es la mejor de todas, aunque en aspectos técnicos tal vez haya sido superada por Fitzgerald y Vaughan (otras dos que conmueven también, sin duda alguna).
      También estamos de acuerdo en eso que dices que hay artistas que nos acercan a la tierra, a las raíces o al dolor; es decir a lo más íntimo de nuestra humanidad. Tenemos que dar gracias por poder acceder a ellos.

      Un abrazo.

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  2. Durísimo poema convertido en belleza por la voz de Billie Holiday, pero sin tu ayuda desgranando su origen quizás no lo hubiese entendido por completo.
    Un abrazo.

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    • Borgeano dice:

      Hay canciones que nos conmueven desde su misma melodía o desde el dolor de la voz (ambos aspectos se aúnan en este caso); pero a veces saber algo de ellos acrecienta el placer estético, ya que no podemos hablar de placer en el sentido moral del término. Claro que hay otros casos donde uno se enamora de una canción, busca información y lo que encuentra en lugar de acrecentar el placer lo diluye, porque se encuentra cada tontería con melodía bonita que para qué hablar de ello.
      Demos gracias de que en este caso todo confluye en lo que es una verdadera obra de arte.

      Un abrazo.

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  3. Gracias por contarnos la historia de esta desgarradora canción. Feliz día. Un fuerte abrazo.

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    • Borgeano dice:

      Gracias a ti por estar siempre aquí. Me alegro que la entrada haya sido de tu agrado, en particular porque me gusta mucho en lo personal. A veces sucede eso, que uno se enamora de un tema o de un texto que escribió y que éste no tiene la devolución que uno esperaba, mientras que otras veces uno no está tan convencido y sin embargo reciba mucha más correspondencia desde la otra parte. Supongo que a ti misma te ha pasado con tus poemas…

      Un abrazo.

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  4. luluviajera dice:

    Una historia durísima y una canción que cuando se la escucha sin conocer si significado, suena casi romántica. Gracias por hacerme conocer todo lo que hay detrás de ella.

    Un abrazo.

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    • Borgeano dice:

      Como le decía a Alberto aquí arriba, a veces conocer más de una canción nos hace que podamos valorarla con mayor profundidad (mientras que en otros casos logra todo lo contrario). Ésta canción en particular es un ejemplo de que a veces el arte y la música pueden decir cosas más interesantes que sólo tonterías pasajeras y vulgares.

      Un abrazo.

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  5. Magnífica entrada que cuenta con todo mi reconocimiento y agradecimiento.
    Saludos entre mar y nubes, hoy, amigo Borgeano.

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    • Borgeano dice:

      Una canción deliciosa con un trasfondo muy duro. Ayer vi, de pasada, una entrega de premios a la música y todo lo que se oía allí era pura trivialidad. Menudo contraste.
      Gracias por tu presencia.

      Abrazo apretado.

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