Esto va a ser breve. No voy a decir nada demasiado profundo ni interesante sobre lo que acaba de suceder en México por la sencilla razón de que excede lo que es posible poner en palabras. Mi afecto por este país que ya siento como mío hace que considere como trivial cualquier consideración sobre este asunto. El dolor es dolor y, como bien dijera Ramón Gómez de la Serna «No hay color para el luto».
Lo único que quisiera hacer, entonces, es destacar algo de lo que he estado hablando desde hace unos días y que también tiene una estrecha relación con la entrada y el poema que les compartí ayer. El valor del otro puesto, esta vez, en evidencia directa por las terribles circunstancias que todos conocemos. Para todos aquellos para quienes la vida es sagrada, entonces, el reconocimiento que se merecen.
Los jóvenes.
De manera inmediata las calles se vieron inundadas, pocos minutos después del terremoto, por una gran cantidad de voluntarios, la mayoría de ellos, como podrán ver en cualquier imagen que les llegue hasta ustedes, fueron jóvenes que no dudaron ni un segundo en hacer lo que estuviese al alcance de sus manos para ayudar a quien lo necesitara. Hoy, un día después, son ellos quienes más trabajan en los centros de acopio de agua, medicinas, alimentos y herramientas. Esos jóvenes que tan criticados son en líneas generales son los primeros que actúan y trabajan a destajo por el bien de todos aquellos que se encuentran bajo los escombros y, algo que no deberían olvidar los adultos que suelen señalarlos con el dedo cada vez que tienen la ocasión, sin pedir nada a cambio.
Los topos.
Los Topos (como se conoce a la Brigada Internacional de Rescate Tlatelolco Azteca A.C), es una agrupación civil que nació en México en 1985, luego del terremoto de aquel año. El trabajo que llevan adelante los integrantes de este grupo es por demás notable. Poniendo su vida en riesgo se adentran por entre los escombros para rescatar personas o para determinar el mejor camino a seguir si es que no pueden hacerlo de manera directa.
Sólo pensar en estar atrapado entre cientos o miles de toneladas de concreto es algo que puede paralizarnos de miedo; ellos, sin embargo, lo hacen adrede con la única intención de ayudar a alguien.
Ellos.
No podían faltar, claro está. Ellos siempre están allí prestos a ayudar y, también, a salvar vidas (y pensar que hay gente que se queja de que los salven a ellos. Pero no, hoy nada de eso; hoy vamos a hablar de los que sí valen algo). Ecko, Frida, Evil (tengo entendido que son los nombres de los tres de la foto), más Titán y algún otro del que se me escapa el nombre, también aportan lo suyo. De los tres primeros, Frida es una veterana rescatistas y ha trabajado en tareas de salvamento en Guatemala, Haití y Ecuador (ella sola llevaba en su cuenta 52 personas encontradas). De Titán no sé mucho, pero leí que lleva encontradas a veinte personas sólo en las últimas veinticuatro horas.
Hay gente (hay seres) para quienes el otro es alguien; simplemente alguien, y actúan en consecuencia. Sólo nos queda desear que si alguna vez tenemos la mala fortuna de encontrarnos en un trance como este, alguno de ellos se encuentre cerca; de lo contrario lo que deberíamos hacer es convertirnos en uno de ellos.
Estoy muy de acuerdo en lo que escribes hay muchos jóvenes que en estos casos que son los primeros en tender la mano a quien lo necesite sin importar si ellos tienen ahora un trabajo o sus propias necesidades en sus hogares.
Los perros que son rescatistas, deberían imagen de lo que son los animales hoy en dia, ya que aún hay personas con poco corazón y ya no podemos considerarlos seres irracionales, hay miles de historias de lo que los perros hacen por nosotros. Démosle cariño y comida cuando los veamos.
Besos.
Abrazos México.
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Sobran las palabras, fuerza México!!!
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Otro para tí!!
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Está todo dicho, y bien dicho.
Mi solidaridad con todo el pueblo mexicano.
Un abrazo
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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La juventud responde, es un buen signo y esperanzador.
Un abrazo
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Ánimo y fuerza para todos los damnificados y los voluntarios!!
Un abrazo.
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Hermosas flores que lucen más hermosas entre los escombros. ¡Adelante, México!
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Cierto 🙂
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La importancia y energía positiva del voluntariado🙂
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Es difícil no emocionarse con los hechos ocurridos, tragicos y dramaticos, y es digícil no sentirse orgullosos de tantos seres generosos siempre dispuestos a colaborar arriesgando incluso sus vidas. Y es difícil no emocionarse con la entrada que has hecho hoy en honor a todos ellos.
Mi abrazo solidario y esperanzador. En ruta, dejando atrás el mar.
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras, Isabel; no es posible decir nada sin caer en lugares comunes, de allí que preferí limitarme a poner de relieve a quienes realmente han marcado una notable diferencia. Mi respeto a ellos.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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No puedo añadir nada más a lo que tú has expresado, tienes toda la razón y solo añado mi gratitud desde España a todos aquellos que están defendiendo a la vida, rescatando vida, arrancando de las garras de la muerte a aquellos afectados de tan terrible terremoto. Mi corazón está con todos.
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras y por tu solidaridad.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Tu reconocimiento es fuerza para los que tenemos la suerte de estar a tu lado. Contagias generosidad y coraje y nos armas de un sentido humanitario tal que nos hace crecer como personas dispuestas a darnos a los que lo necesiten. Te admiro
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Esta gente nos demuestra que no todo está perdido; que aún hay esperanzas para todos, cosa que los medios o los pesimistas de siempre se encargan de hacernos creer.
Gracias por tus palabras, María; no es posible decir nada sin caer en lugares comunes, de allí que preferí limitarme a poner de relieve a quienes realmente han marcado una notable diferencia. Mi respeto a ellos.
Un fuerte y afectuoso abrazo.
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Luego de haber visto y seguir viendo a personas en los medios de comunicación a personas hablar simplemente para llenar horas de aire, me alegra saber que hay personas que se limitan a agregar algo más sobre lo ocurrido en México.
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Déjame decirte que ese es un tema que pensé en tratar (de allí que en un momento dije «No, hoy nada de eso; hoy vamos a hablar de los que sí valen algo»), pero decidí no hacerlo para no brindarle ni siquiera un pedacito más de espacio del que ya tienen. Es patético ver cómo los medios llenan horas y horas de nada y es lamentable los errores que caen al tener que hablar tanto sin decir nada. En fin, que los que realmente valen siempre están ahí, por suerte, y a ellos debemos darles el lugar que se merecen.
Gracias por tus palabras.
Un abrazo.
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Estoy totalmente de acuerdo con lo que decís. Un abrazo.
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Otro para vos. Por cierto, en este preciso momento estoy escribiendo la entrada que subiré esta noche y tiene relación con el tema de la información. No hay caso, aunque uno no quiera hablar de ellos, termina haciéndolo.
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Hermoso el mensaje, y necesario. Mi aportación al diálogo es indirecto esta vez; me remito al maestro, en tantos sentido, que es Francisco Toledo, con una imagen y un texto en los que veo reflejados todo el dolor y toda la esperanza que caben en esta tragedia. Acá el link:
http://www.proceso.com.mx/503646/del-temblor
Saludos.
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