Hablar para decir algo

.

Joaquin Phoenix

Ayer Joaquin Phoenix ganó su primer premio Oscar como mejor actor; pero no es de cine de lo que voy a hablar aquí, sino de algo tangencial: la entrega de premios más famosos y de sus discursos y, particularmente del discurso que nos regaló Joaquin Phoenix ayer.

Es bien sabido que Hollywood detesta los discursos políticos o toda muestra de pensamiento que se aleje aunque sea un poquito de lo meramente cinematográfico (y mucho más aún cuando el discurso es crítico. Tal vez el más famoso, el que sigue pasándose una y otra vez —más como burla que como otra cosa— es cuando Marlon Brando en lugar de ir a recibir su premio envió a la actriz Sacheen Littlefeather (Pequeña Pluma), ataviada con un traje típico Apache). Ayer Joaquin Phoenix nos brindó un discurso con tintes políticos, sociales y hasta emocionales (como cuando recordó a  su hermano muerto en 1993 River Phoenix). El discurso de Phoenix fue el siguiente:

«No me siento elevado sobre mis compañeros nominados o nadie de este cuarto. El mayor regalo que tengo es usar mi voz para los que no tienen una. Creo que cuando hablamos de desigualdad de género, de racismo, de los derechos LGTB o de los derechos de los animales, estamos hablando de la lucha contra las injusticias. Hablamos de la lucha contra la creencia de que un país, un grupo, una raza, un género o una especie tiene el derecho de dominar, controlar, usar, y explotar a otro con impunidad. Creo que nos hemos desconectado del mundo natural y muchos somos culpables de tener una visión egocéntrica del mundo; creernos que somos el centro del universo. Nos metemos en la naturaleza y la saqueamos por sus recursos. Nos creemos con el derecho a inseminar artificialmente a una vaca y robarle a su bebé, a pesar de que sus gritos de angustia son inconfundibles, y después tomarnos su leche —destinada a su ternero— y la ponemos en nuestro café o nuestros cereales. Creo que tenemos la idea de que el cambio personal significa sacrificar algo, renunciar a algo; pero los seres humanos, en nuestros mejores momentos, somos tan creativos e ingeniosos… y creo que cuando usamos el amor y la compasión como principios, podemos crear e implementar sistemas de cambio que sean beneficiosos para todos los seres vivos y para el medio ambiente. […] Creo que nuestro mejor momento es cuando nos apoyamos mutuamente. No cuando nos vetamos por errores pasados, sino cuando nos ayudamos a crecer, cuando nos educamos, cuando nos guiamos mutuamente hacia la redención. Eso es lo mejor de la humanidad».

Sé que los discursos de agradecimientos son lo usual y ello no está nada mal ¡pero qué bien se siente escuchar a alguien que dice algo más de lo meramente habitual! ¡Qué bien se siente que alguien use su voz para hablar desde su propia humanidad! (ni siquiera tenemos que estar de acuerdo con todo lo que una persona así dice; pero el simple hecho de que nos hable desde sí mismo ya nos obliga al respeto y elogio de su postura).

Tangencialmente, ese discurso me trajo a la memoria un poema de mi novia eterna: Wislawa Szymborska y si bien el lazo entre el discurso de Phoenix y el poema de Szymborska no es estrictamente directo, recordemos que el arte se maneja, más que nada, por aproximaciones.

 

Szymborska

.

Hay quienes

Hay quienes llevan a cabo la vida más hábilmente.
Tienen orden en su interior y en su alrededor.
Para todo la manera y la respuesta adecuada.

Adivinan inmediatamente quién a quién, quién con quién,
con qué objetivo, por donde.

Ponen el sello en la verdades absolutas,
arrojan a la trituradora los hechos innecesarios,
y a las personas desconocidas
a las carpetas destinadas a ellas de antemano.

Piensan justo lo debido
ni un segundo más,
porque tras ese segundo acecha la duda.

Y cuando los dan de baja de la existencia,
dejan su puesto por la puerta señalada.

A veces los envidio;
afortunadamente se me pasa.

5 comentarios el “Hablar para decir algo

  1. Muy contundentes, el poema y el discurso. Está bien, y necesario creo, que se eleven voces disonantes con el sistema. Me encantó el discurso porque es lo que muchos pensamos pero no tenemos el altavoz adecuado para que resuene en todo el mundo.
    El poema también es como un martillazo a la conciencia.

    Un fuerte abrazo

    Le gusta a 1 persona

    • Borgeano dice:

      Sí, hizo bien Phoenix al decir lo que realmente piensa y no lo que la industria espera. Sobre cuando comienza aclarando que ellos tienen una voz de la que la mayoría carece. Sea como fuere, nosotros tenemos, también, nuestra pequeña voz que puede sumarse aquí y allá para seguir esparciendo las ideas.
      El poema, como siempre, sencillo y contundente.

      Un fuerte abrazo.

      Le gusta a 2 personas

  2. […] a través de Hablar para decir algo — El Blog de Arena […]

    Me gusta

  3. Carmen B. dice:

    Un discurso valiente y comprometido y un poema que tiene común denominador con el discurso. Pero yo ,ahora ,subrayo que tú lo pongas aquí; tú ves y/ o escuchas el discurso y le encuentras el paralelismo con el poema. Y le pones tu voz también: lo difundes nos lo brindas. Y te leemos y , yo noto como estamos vibrando todos: El actor, la Poetisa, tú y los que te leemos en la misma frecuencia de esas “ondas” invisibles que son los sentimientos de piedad por los que no tienen voz.
    Un abrazo fuerte.

    Le gusta a 1 persona

    • Borgeano dice:

      Muchas gracias por tus palabras, Carmen. Esa cualidad (la cual no sé si se ha forjado con el paso de los años o es que ya ha venido «de fábrica») de poder relacionar esto con aquello y lo de más acá con lo de más allá es una de las cosas que más placer me producen, en lo que respecta a mi vida íntima. Será que se trata en realidad de un círculo que se realimenta a sí mismo de manera constante… creo una relación, eso me da placer (y además alguien como tú también lo aprueba) y entonces vuelvo a crear otra relación…
      Como sea, feliz estoy de ello y más feliz aún de que a ustedes les guste el resultado.

      Te mando un fuerte abrazo.

      Le gusta a 1 persona

Deja un comentario