Una serie de citas sobre el arte de la lectura. Sin más palabras ni explicaciones. Porque sí.
Leer buenos libros es como mantener una conversación con las mentes más eminentes de los siglos pasados y, además, una conversación estudiada en la que estos autores nos revelan solo lo mejor de sus pensamientos.
– René Descartes, Discurso sobre el método, 1637.
Para él, los libros eran como amigos, y leer una extensión de compañerismo, una forma de expandirse más allá de la circunferencia del tiempo y colocar el círculo de conocidos entre los familiares.
– Michael Holroyd, hablando de Lytton Strachey, 1971.
«No hay nada como los libros». De todas las cosas que se venden, no hay nada que se les compare. Son las más baratos de todos los placeres, los que menos se cansan, ocupan poco espacio, guardan silencio cuando no los quieren y, cuando los recogen, nos enfrentan cara a cara con los hombres más selectos que hayan vivido, en sus momentos más selectos.
Como compañero de caminatas por el país, prefiero llevar en mi bolsillo a Milton (al que he llevado durante veinte años), en lugar del para nada adorable bull terrier Trimmer, que me acompañó durante cinco años. Milton nunca se inquietó, ni asustó a los caballos, ni corrió tras las ovejas o fue atropellado por una furgoneta de mercancías.
Samuel Palmer, carta a Charles West Cape, 31 de enero de 1880.
Y mi cita favorita (al menos de las de hoy):
En un sentido muy real, entonces, las personas que han leído buena literatura han vivido más que las personas que no pueden o no quieren leer. … No es cierto que solo tengamos una vida por vivir; si podemos leer, podemos vivir tantas vidas más y tantos tipos de vidas como deseemos.
– S.I. Hayakawa, El lenguaje en el pensamiento y la acción, 1952.